
Se recomienda sacarse las joyas para ducharse, bañarse y hacer ejercicio.
Evitar el contacto con perfumes, cremas, aceites y otros productos cosméticos, incluso los
naturales.
La duración del baño de oro dependerá de diferentes factores como la sudoración, su uso inadecuado, el PH de la piel o el uso de productos cosméticos.
Se recomienda no dejar las joyas en un sitio con exposición directa a la luz solar.
Las piezas bañadas en oro son más delicadas y susceptibles a perder el color al largo del tiempo, especialmente si no se realizan las curas nombradas anteriormente. De todas maneras, todas las piezas se pueden volver a dorar, para hacerlo puedes contactar conmigo o bien llevarlas a una joyería y allí te informarán de como hacerlo.
Para limpiar las piezas de plata (sin baño de oro) se aconseja fregarlas con un cepillo de dientes viejo, bicarbonato y/o jabón suave. En el mercado también existen productor especiales para limpiar la plata que podréis encontrar en tiendas de joyería o bien en internet